domingo, 14 de diciembre de 2008

De nuevo en la ventana

Hace ya unas semanas que escribí el siguiente texto:


No dejo de mirar hacia la lejanía.
Entre la curiosidad y la impaciencia.

Hay algo claro y firme que se sostiene.
Una vieja nota musical, con el aura de libertad…pero de la real. Y un viaje de la mano de quien no finge sonrisas ni miedos.
Inquietud en el cambio. Las ilusiones vienen de visita, pero se van rápido, no les gusta el café preparado a la mesa.
Y Chopin resonando acompañado de unas pastas y aislamiento armónico.

Es un sendero encaminado hacia algo más…al aprendizaje que, sin conciencia, cada día absorbemos, sin reconocimiento de esfuerzo.
Mañana lo agradeceremos.

Os contaré algo…entre la multitud de las calles vacías de Sevilla, en una plazita cerca de San Luis, camino de la indecisión, la perturbación, la monotonía de los días cansados de inventar…pude distinguir un sonido de esperanza, algo que me hizo frenarme en seco, y cerrar los ojos (por un momento la calle vacía…).
Lo vi, allí mismo, lo respiré. En una ventana ajena a la inseguridad de los caminantes, unas manos al piano, tocando los límites del lenguaje natural humano…música…

Lo admiré, lo envidié, lo odié, lloré…
Un toque más de atención. Hay que luchar por lo que uno quiere.
Y seguí caminando.

“En la vida no hay clases para principiantes…en seguida exigen de uno lo más difícil”

Todo un camino a recorrer, señores.


Hoy, después de 3 semanas, viniendo de ensayar, he vuelto a pasar por la misma calle...y he vuelto a escuchar ese piano. Y hoy he podido ver en la ventana, que se trata de un chico, con gafitas...toca de escándalo.
Esta vez me he parado a escucharlo, y no he llorado...he seguido mi camino con una sonrisa y renovada...
Sigo creyendo que todo lo que nos ocurre, va encaminado hacia lo mejor para uno...un fracaso, una equivocación, una caída....nos ayudan a comprender la vida, y a aprender...y eso es bueno, que vayamos aprendiendo de los chocazos, las caídas, los tropezones...es nuestra manera de levantarnos.

5 comentarios:

Su dijo...

También aprendes de las cosas buenas, aunque eso es más fácil. Pero es bueno darse cuenta de que de todo se aprende antes de perder el tiempo y perderse.

Un besazo

Isabel dijo...

Hola guapi!!! un besito fuerrrrte y to palante, siempre ;)

Naida dijo...

He estado evadida unos días...¿que te ha pasado? ehhh!! nada de ir para abajo que mi cara de enfurruñamiento puede viajar de Bcn a Sevilla en un plis!! arriba!! aprende lo que sea y a correr que son dos días

Sol; Anisa dijo...

Nada que la brisa oceánica no pueda reparar...¿qué te parece mayo para la reunión de bloggeras? A un par creo que podría darles alojamiento, estuve hablando con mis alumnas y les hizo mucha ilusión, algunas empezaron a planear turnos para ir a los aeropuertos a buscarlas a todas, jeje, qué monas son...
un besote
Anisa

Anónimo dijo...

Esta noche me viene bien leer tu entrada. A ver si de mucho leer, consigo metérmela bien dentro en la cabeza.
Me alegra comprobar que ves lucecitas al final de cada túnel. Eso es que el tren va en marcha... y por buen camino.

Un abrazo de esta constipada que esta tarde empezó a tomarse los antibióticos de turno :(